Nunca, nunca, nada es tan radical.
Siempre, siempre hay una alternativa, otra vía, un atajo, un desvío.
Quizás sea la arquitectura ingenieril de mi pensamiento.
Quizás sea mi naturaleza de paz.
Quizás quiera pensar que haga lo que haga siempre iré hacia allá.
Que por eso nunca, nunca, nada es tan radical.
Que por eso siempre, siempre (sólo, sólo) elijo la trayectoria. Porque el mojón de llegada vino conmigo al mundo.
3 comentarios:
¿Destino?
Totalmente de acuerdo. Besitos para ti.
Que bueno leerte, y si, siempre hay una alternativa, por mas loca o arriesgada que sea.
Besos!
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